Si la envidia fuera tiña...

Me encantan los blogs y desde que los descubrí, no puedo dejar de leerlos. Cada día me sorprendo porque encuentro algún blog interesante por la red. Siempre he envidiado y mucho a la gente que tiene el empeño, paciencia y, sobre todo, la creatividad de hacer uno y actualizarlo a menudo. Me parece alucinante la cantidad de cosas originales y divertidas que te encuentras en ellos. Por una parte, el blog puede ser una herramienta de trabajo muy útil; por otra, los blogs que te cuentan historias más personales, reales o ficticias, resultan entretenidísimos. No tengo ni la más remota idea de lo que voy a escribir, pero de momento, como soy un poco envidiosa, ¡quiero tener mi blog!